INGREDIENTES
- 270 gramos de galletas digestive.
- 90 gramos de mantequilla.
- 900 gramos de queso en crema.
- 2 yogures griegos.
- 250 gramos de azúcar.
- 3 huevos y una yema más.
- El zumo de medio limón.
- 3 cucharadas soperas de harina de repostería.
- 1 cucharadita de café de esencia de vainilla.
- 1 bote de mermelada de fresa.
ELABORACIÓN
Forramos la base de un molde desmontable de 23 cm con papel de hornear.
Picamos las galletas.
Con los dedos, incorporamos la mantequilla a la galleta picada.
Colocamos la mezcla en la base del molde.
La aplastamos con la mano con cuidado, y subiendo un poco por las paredes. Y lo metemos en el congelador hasta que tengamos la crema lista.
Batimos un poco el queso crema.
Y vamos agregando el azúcar, los yogures griegos, el limón, la esencia de vainilla y la harina.
Batimos los huevos un poco a parte, y los agregamos a la mezcla. Batimos hasta que esté todo bien integrado. Si utilizamos un robot, tenemos que pasar una lengua por las paredes y seguir batiendo un poco más, ya que se suele quedar el queso sin mezclar por esa zona.
Precalentamos el horno a 160 grados. Sacamos el molde del congelador y vertemos la mezcla.
Horneamos unos 50 minutos a 160 grados. Es muy importante no abrir el horno hasta que esté totalmente fría. Lo ideal es dejarla en el horno durante dos horas. La cubrimos con la mermelada de fresa pasada por un colador para que quede fina, y la metemos en la nevera.
CLAVES PARA QUE NO SE AGRIETE:
- No tiene que subir en el horno. No hornear a fuego fuerte.
- No mezclar demasiado la crema.
- Golpear el molde antes de meterlo al horno para eliminar las posibles burbujas.
Ole, ole!
ResponderEliminarTengo pendiente hacer la de mi madre, también está para chuparse los dedos pero no sé si cómo esta...
Cuando la publique, te aviso!
Besisss!
Por fa!!!!
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